La reconocida chef y creadora de contenidos Lizzi Piñanez, conocida como Lizzi Recetas, compartió con sus seguidores una insólita y angustiante experiencia que vivió cuando estaba por viajar a la playa después de casi siete años.
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“Hoy, en mujeres, casos de la vida real, les voy a contar cómo perdí mi vuelo y la oportunidad de ir a la playa”, comenzó diciendo con su característico humor, aunque lo que vivió fue todo menos gracioso.
Lizzi tenía planeado viajar a Miami con un grupo de amigos. El primer paso fue gestionar la visa, ya que había tenido un intento fallido hace doce años. Finalmente, 22 días antes del vuelo logró obtenerla y rápidamente compró los pasajes.
“Todo estaba perfecto. ‘Miami me lo confirmó’. Llevé todos mis productos para hacer mis fotos, mi producción en la playa”, comentó entusiasmada.
Sin embargo, un día antes de viajar, comenzó a sentir una fuerte ansiedad. “Siempre tuve miedo de volar, le tengo pánico al avión. Por lo general, me pastilleo antes de subir porque, si no, no lo logro”, explicó. Esa noche no logró dormir y al llegar al aeropuerto, la tensión se intensificó.
“Ya estábamos en la fila para pasar a migraciones, y sentía que la ansiedad me invadía. Me empezó a dar una especie de taquicardia, empecé a mirar mi boleto y pensé: ‘Cinco horas y tengo que estar en este vuelo’. Y ahí me agarró un ataque de pánico”, relató.
Ni siquiera logró cruzar migraciones. Se apartó del grupo, se sentó frente a una cafetería y comenzó a llorar. “Sentía que me iba a morir, que no iba a volver a ver a mi hijo. Me dio así, re mal”, expresó profundamente conmovida.
Finalmente, por recomendación de la aerolínea, decidió no abordar el vuelo y se quedó en tierra. “Todo el mundo me dice que me salvé de algo, pero no puede ser que cada vez que suba a un avión tenga esta sensación”, reflexionó.
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Al terminar su relato, Lizzi pidió ayuda a sus seguidores: “No me fui, tengo terror a volar. Evidentemente, después de que fui mamá, esto fue empeorando. No sé si tengo que ir a un psicólogo, si alguien me puede ayudar con esto… Pasen sus tips, qué les ayudó, porque no puedo vivir así”.
“Y acá estoy, pasando frío, mis amigos en la playita y yo, la más boluda. Ni siquiera desarmé mi maleta porque todavía no supero”, concluyó con sinceridad.