Justo antes de interpretar su éxito La Tortura, Shakira se agachó en el escenario, revisando algo entre sus pies. Al incorporarse, lanzó un inmediato grito de "¡Auch!” mientras se revisaba rápidamente la mano derecha con la izquierda.
Aunque sus bailarines mantuvieron la rutina, la artista se revisó los dedos por unos 10 segundos de una forma un poco apresurada. Finalmente, la Loba logró quitarse el objeto que aparentemente tenía “clavado” en uno de sus dedos.
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Tras resolver el percance, la cantante ofreció una sonrisa apenada por la breve pausa y continuó con la rutina de La Tortura al grito de "¡Eso Ecuador!”.
Los fanáticos han especulado sobre el objeto, teorizando que pudo ser desde una astilla o un tornillo, hasta una uña rota debido a la intensa coreografía. A pesar del breve susto, el espectáculo de la barranquillera prosiguió sin mayores interrupciones.
En lo que marca su regreso al país después de siete años, la artista ha movilizado a miles de fanáticos y generado un gran impacto económico, estimado en USD 40 millones.