“Nos conocimos en la prueba de vestuario -de ‘Jamón, jamón’, de Bigas Luna-, nos miramos y supongo que pasó algo. Algo que no tiene explicación y que va más allá de la lógica y el razonamiento”, admite Bardem a la revista Gentlemas’s Journal, un comentario poco habitual en él, siempre celoso de su vida privada.
“Ella tenía 17 años y yo 22", recuerda Bardem, quien añade que era la primera película de su mujer como actriz y una de las primeras en las que él participó.
“Pero, en aquel entonces, teníamos vidas diferentes, objetivos, metas y propósitos diferentes. Sin embargo, algo había ahí: una energía, una química, una manera de confiar el uno en el otro como seres humanos. Y eso perduró durante tanto tiempo, a pesar de que no nos vimos ni hablamos durante muchos años”, añade el actor.
Javier Bardem y Penélope Cruz volvieron a coincidir en ‘Vicky Cristina Barcelona’, película de Woody Allen, donde volvió a surgir la chispa.
Para su sorpresa, la conexión seguía intacta y “resultó que los dos estábamos solteros en ese momento, así que, naturalmente, ocurrió lo que tenía que pasar: dos personas volvieron a conectarse porque compartían un montón de cosas, mucho más de lo que esperaban”.
Entre ellas, que se conocieron “antes de todo el ruido, antes del éxito y antes de que nadie nos viera con otros ojos por lo que éramos ahora, en lo que nos habíamos convertido. Y esa es una base importante, confiar en alguien porque lo conoces de verdad y él te conoce de verdad. Tú me ves, yo te veo. Eso es importante”, admite el actor.
Bardem, entre otros filmes, actuó en ‘No Country for Old Men’ de los hermanos Joel y Ethan Coen, papel por el que consiguió el Oscar al actor secundario, así como el Globo de Oro y el Bafta británico; o en ‘Biutiful’, del mexicano Alejandro González Iñárritu, por el que recibió el premio al mejor actor en el Festival de Cannes.
Por su parte, Penélope Cruz ha desarrollado una importante carrera internacional y cuenta con reconocimientos como el Premio Donatello (Italia) a la mejor actriz, el del Público de los Premios Europeos del Cine o el Premio Donostia del Festival de Cine de San Sebastián (España).
Ambos se casaron en 2010 y son padres de dos hijos.
La afición de Penélope Cruz por la fotografía viene de lejos y tomó las imágenes en el hogar que ambos comparten en Madrid.
En él se ve a su marido en la ducha, tomando un café sin camiseta, riendo abiertamente en pantalones cortos y poniéndose los pantalones con una naturalidad de andar por casa tal y como se han realizado. EFE