Luego de un 2019 muy duro para los duques de Sussex, la pareja anunció oficialmente su renuncia a los deberes reales. El comunicado se realizó a través de sus redes sociales.
“Después de muchos meses de reflexión y discusiones internas, hemos optado por hacer una transición este año para comenzar a forjar un nuevo papel progresivo dentro de esta institución”, inició el texto.
En la mencionada publicación, los duques señalan que darán un paso al costado como miembros de la familia real y, por ende, renunciarán a sus deberes reales, con la intención de trabajar para ser financieramente independientes, pero añadieron que continuarán apoyando a la reina.
“Ahora planeamos equilibrar nuestro tiempo entre el Reino Unido y América del Norte; continuaremos honrando nuestro deber hacia la reina, la Commonwealth y nuestros patrocinios”, decía una parte del texto de los duques, quienes se convirtieron en padres en mayo del 2019 del pequeño Archie Harrison Mountbatten-Windsor.
La pareja explicó que este equilibrio geográfico permitirá criar a su hijo con una apreciación de la tradición real en la que nació, al mismo tiempo que brinda a su familia el espacio para centrarse en su siguiente capítulo, incluyendo el lanzamiento de su nueva identidad caritativa.
Los duques continuarán colaborando con la familia real, según explicaron en su anuncio.
La pareja se casó en mayo de 2018, en una majestuosa boda en el castillo de Windsor. Habían decidido pasar las fiestas alejados de la reina y del resto de la familia real. Ahora, tal y como han comunicado, su hogar estará entre el Reino Unido y América del Norte.