Ronaldo de Assis Moreira, Ronaldinho, contó a los policías y a los fiscales que allanaron en la noche del miércoles su cuarto de hotel que los documentos paraguayos de contenido falso por los cuales está actualmente demorado fueron un “obsequio” de las personas que lo trajeron a Paraguay.
Esto fue lo señalado por el fiscal Federico Delfino durante una conferencia de prensa este jueves. Sobre el punto, indicó que en las próximas horas la Fiscalía tomará determinaciones con relación a las personas sospechosas de haber gestionado los pasaportes y cédulas de identidad de contenido falso.
Al respecto, el fiscal señaló que al bajar del avión en Paraguay Ronaldinho recibió los documentos y que estos fueron un “obsequio” de las personas que lo trajeron al país. No obstante, el investigador no precisó quiénes serían estas personas.
El ex jugador de fútbol se encuentra actualmente en la sede de la Unidad de Crimen Organizado del Ministerio Público, para prestar declaración indagatoria. Al llegar al recinto, ni él ni su hermano, Roberto de Assis Moreira, dieron declaraciones a la prensa.
“El señor Ronaldinho junto con su hermano ingresaron ayer a la República del Paraguay a las 9.05 de la mañana en un vuelo comercial a través del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi. En ese ingreso han utilizado un pasaporte paraguayo auténtico, pero con contenido falso”, informó el representante del Ministerio Público.
El fiscal dijo que el delito por el cual ambos hermanos están bajo investigación es el de uso de documento público de contenido falso y que la Fiscalía tiene 24 horas desde el allanamiento hecho anoche a la habitación del hotel del ex jugador de fútbol para definir una eventual imputación.
Sobre el punto, Delfino indicó que incluso se corroboró que los números de los pasaportes que presentaron los hermanos Assis Moreira corresponden a otras personas.
En ese sentido, recalcó que la Fiscalía tuvo conocimiento del caso a partir del mediodía del miércoles, a través de una denuncia del Departamento de Investigaciones de la Policía.
“Se recabaron datos en la República de Brasil en forma oficiosa, atendiendo a que manejábamos la información a prima facie de que a Ronaldinho y a su hermano se les había retirado sus pasaportes por problemas financieros y que inclusive pesaba sobre ellos una investigación, pero nosotros tuvimos una contestación de parte de nuestros contactos en el Brasil de que les fue repuesto el pasaporte brasileño aproximadamente en octubre, noviembre del año pasado”, indicó Delfino.
Asimismo, mencionó que ambos hermanos salieron del Aeropuerto Guarulhos de Sao Paulo, Brasil, con sus pasaportes brasileños, pero hicieron los trámites de Migraciones en Paraguay con los documentos que señalaban que eran ciudadanos naturalizados paraguayos. Los pasaportes y las cédulas les fueron entregados ni bien salieron del avión.
Según informó la Policía, ambos hermanos están demorados y oficialmente hay un solo detenido en la causa: Wilmondes Sousa Lira, de 45 años. Este estaba en el cuarto de hotel cuando fue allanado.
Dijeron que dueño de casino los trajo
Durante el allanamiento a su cuarto de hotel, Ronaldinho y su hermano dijeron a la Policía que vinieron al Paraguay por invitación de Nelson Pelotti, dueño del casino Il Palazzo, y que de paso fueron contactados por la representante de la fundación Fraternidad Angelical, la empresaria Dalia López, para algunos eventos.
El jugador llegó el miércoles al país para participar de una campaña comunitaria, impulsada por una fundación que brinda asistencia médica para niñas y niños en situación de pobreza. Además, iba a presentar su nuevo libro: Genio en la vida.
Por su parte, el director de Migraciones, Alexis Penayo, sostuvo que en el momento en que ingresó al país no había motivos para negarle la entrada y que la alerta fue dada por los funcionarios a su cargo. Anunció que se abrirán sumarios para deslindar responsabilidades.
En contrapartida, el ministro del Interior, Euclides Acevedo, fue tajante al señalar que habrá desvinculaciones en Migraciones por presunta complicidad y que la institución no debería haber dejado entrar al país a alguien con documentos falsos.
