Con una corta carrera, El Turko al Corte, nombre artístico de Samir Luraschi, logró algo que pocos artistas pueden contar: crear un género desde cero y hacerlo explotar en Argentina, Brasil y ahora en Paraguay. Su estilo, el Flow BR, mezcla el funk brasileño con letras en español y ritmos del RKT o con trap. Se convirtió en uno de los sonidos más virales de la escena urbana sudamericana.
“El Flow BR nace de una frase que tiré en una canción que se llama Los Pibes de las Motos. Dije: “Flow BR como piloteando un XR”, haciendo referencia a los brasileros que andan en moto, y esa parte pegó tanto que decidimos transformar en un género”, comentó.
El artista comentó cómo fue creando esta fusión musical. “La idea fue simple pero explosiva, traer el funk brasileño al habla hispana, primeramente adaptándolo y luego fusionando con lo que suena en los barrios de Argentina, creando algo completamente nuevo y funcionó a la perfección”, recordó.
Aunque no fue fácil para el cantante, lo gratificante llegó con el reconocimiento de sus seguidores. “No me esperaba este éxito tan rápido. Pero sí, sabíamos que estábamos haciendo algo distinto. Crear un género no es fácil. Tenés que innovar todo el tiempo. Buscar nuevos sonidos, nuevos instrumentos, ideas frescas. Es difícil, pero cuando la gente lo reconoce, es una locura”, explicó.
Te puede interesar: Brad Pitt habla por primera vez de su divorcio de Angelina Jolie
Durante las pasadas presentaciones que realizó en Paraguay, El Turko destacó que el paraguayo llena los shows para cantar y gritar de principio a fin, lo que genera una gran satisfacción. ¿Habrá colaboración con algún artista nacional? fue la consulta a lo que el joven de Rosario dejó la puerta más que abierta: “Estamos buscando a alguien de Paraguay para romperla en un feat”, tanto es así que uno de sus productores es de Paraguay, estamos hablando del cantante, compositor y productor MC ANJO.
En cuanto al estilo, el Flow BR no se detiene, pero él no descarta explorar otros géneros: “Me gustaría hacer trap, cumbia, reggaetón. Pero hoy lo que más me gusta —y a la gente también— es el Flow BR. Es lo mío”.
Su último lanzamiento fue la semana pasada en colaboración con el cantante Alejo Isakk, con Brinca, una canción pegajoza para bailar y disfrutarla con amigos.
El origen del nombre
El nombre El Turko no es un invento de marketing, sino más bien salió de la cancha, de la infancia.
“Me llamo Samir, y mi técnico no sabía decirlo. Un día gritó: "¡traigan al turko!” y quedó para siempre. Después, cuando arranqué con la música, le sumé ‘al corte’, por el corte de revoluciones de la moto. Porque mi música es para los que están en la calle, en las motos, en la movida”, recordó.
Entérate aquí: El Princi lanzó “Por qué te vas” canción en colaboración con el cantante mexicano Carlos Montalvo
Para El Turko, una canción solo vale si nace de algo vivido:. “Siempre escribo sobre historias reales, cosas que me pasaron o que vi. Me parece clave que la gente se pueda identificar. Si cantás que tenés un jet privado, ¿quién se va a sentir identificado con eso? Yo quiero cantar algo que todos puedan sentir como propio”, manifestó el artista que ya superó los 200 millones de reproducciones y obtuvo doble platino con la canción “30 Grados”.
“Esa canción la hice con Mandale Flow. Salió en enero de 2024 y fue un bombazo. Fue todo muy loco”, resaltó.
El joven talento, sin contactos ni dinero para invertir, encontró en TikTok su mejor aliado, comenzó a subir sus temas con lyrics a TikTok y la gente empezó a compartirlos, se hicieron virales. “Fue la mejor estrategia. Gratis, y con efecto multiplicador”, revela.
En su corta pero vertiginosa carrera, El Turko ya sabe que la fama trae muchas cosas, y no todas son fáciles.
“Me están pasando cosas muy locas, que jamás imaginé. Pero trato de mantenerme enfocado. Para mí lo más importante es estar bien con tu familia, con tus amigos, con vos mismo. La plata no lo es todo. Podés tener millones, pero si estás mal, no hacés música”, confesó.
Te puede interesar: En exclusiva: Así festejó MC Anjo sus 10 años de carrera musical
Por eso, cuando le preguntan qué consejo le daría a los pibes que lo miran y sueñan con seguir sus pasos, no duda: “Que estudien, que no se droguen, que se enfoquen en lo que aman. Todo es posible. Si yo pude, ellos también pueden”, finalizó.
El Turko al Corte está haciendo historia. No solo por su música, sino por lo que representa: un artista que desde abajo, con ingenio, autenticidad y talento, está construyendo un puente sonoro entre las calles de Buenos Aires, las favelas de Brasil y las avenidas de Asunción y esto es solo el comienzo.
