26 abr. 2024

Nizugan Junior: “Mi papá me vestía con las ropas de Cachito”

Nizugan Junior y Cachito nos recibieron en el calor de su hogar y compartieron con TVO anécdotas inolvidables vividas junto al padre de ambos, el gran mago Nizugan, quien hace unas semanas se despidió de este mundo. “Ahora vas a tomar la posta, a partir de hoy sos el nuevo papá de Cachito”, le dijo su padre a Junior el día de su boda, en abril pasado, como prediciendo su partida.

Nizugan Jr

Cachito y Nizugan Junior saludando a los lectores de TVO.

Foto: Fernando Franceschelli

Fotos: Fernando Franceschelli/Producción: Mathías Arce

Juan Bautista Castillo Benza (81), más conocido como Nizugan, falleció el 18 de junio pasado, dejando un montón de recuerdos imborrables en varias generaciones de niños que crecieron con su magia y su querido Cachito. Hoy, ese peculiar muñeco tiene un nuevo padre, su hermano, el mago Nizugan Junior, a quien el gran Nizugan dejó el legado de seguir haciendo reír a chicos y grandes.

Junior y Cachito recibieron a TVO en una fría mañana de invierno, en la calidez de su hogar, para compartir anécdotas únicas vividas con Nizugan. Emociones y alegrías se conjugaron en la nota que a continuación compartimos con nuestros lectores.

<p>Nizugan Junior y Cachito fueron hermanos durante cuatro décadas, ahora pasaron a ser padre e hijo. </p>

Nizugan Junior y Cachito fueron hermanos durante cuatro décadas, ahora pasaron a ser padre e hijo.

Foto: Fernando Franceschelli

Nizugan Junior, ¿cómo fueron tus inicios en la magia?

- A los cuatro años fue mi debut en un programa de tevé llamado A nuestra manera, con Mario Ferreiro, el actual intendente de Asunción. Hacía un número de magia con aparición de palomas, al lado de mi papá. Luego me tomé una pequeña pausa por el tema de la escuela y el colegio, y a los 15 años volví al escenario con una rutina.

Volviste en una ocasión muy especial, ¿verdad?

- Papá tenía un salón de eventos en Luque y ahí celebró un nuevo aniversario de trayectoria artística, así que quise sorprenderlo. Tenía 15 años, fui a casa a rebuscarme entre las cosas de magia —porque hacía un tiempo no realizaba más mi número de magia— y justo llegó papá y encontró su frac extendido sobre la cama. Le preguntó a mi mamá: “¿Y esto?”, “¿qué hace acá mi ropa?”. Y ella no sabía qué decirle, pero luego le contó: “Juan está preparándose para hacer su show”.

<p>Nizugan Junior recordó que a los cuatro años ya acompañaba a su padre en el escenario. </p>

Nizugan Junior recordó que a los cuatro años ya acompañaba a su padre en el escenario.

Foto: Fernando Franceschelli

¿Cómo reaccionó tu papá?

- Se acercó preocupado a mí y me dijo: “¿Qué vas a hacer, mi hijo?, porque vos no tenés una rutina preparada ahora”. “Papá, junté algunas cosas y quiero presentar”, le dije. Mi papá era muy metódico. “No tenés nada ensayado, ¿cómo vas a hacer?”, me preguntó. “Quiero hacer porque tengo que estar en tu aniversario de trayectoria”, le respondí. “¿Estás seguro de lo que querés hacer?”, me volvió a preguntar y esa vez fue cuando tomé la posta. “Papá, es ahora o nunca”, le dije y de ahí nunca más paré. Tenía 15 años. Ahora tengo 40, ya llevo 25 años de carrera artística.

Comenzaste muy temprano al lado de tu papá...

- Sí, y luego seguí solo. A los 16 años ya comencé con mi rutina y me independicé, porque siempre le acompañaba a papá en sus shows, cumpleaños y festivales. Hasta que me animé y le dije que quería tener mi show propio. Papá me apoyó en un 100%, me armó mi equipo de sonido, me consiguió los micrófonos, me hizo una escenografía para llevar a los cumpleaños.

<p>El querido muñeco Cachito ya tiene 47 añitos y sigue alegrando a grandes y chicos. </p>

El querido muñeco Cachito ya tiene 47 añitos y sigue alegrando a grandes y chicos.

Foto: Fernando Franceschelli

¿Cómo te sentís con todo ese legado que te dejó tu papá?

-Es una gran responsabilidad el legado que me dejó mi papá, pero aparte de la responsabilidad, siento un gran orgullo. La vez pasada me eché a llorar y le reté a mi papá, le dije: “¿Qué fue lo que hiciste?”, “¡Mirá lo que hiciste!”, “¡Porque me regalaste a Cachito, me regalaste a tu público, y mirá lo que soy ahora, ¡gracias a vos!”.

El día de tu boda, ¿te obsequió a Cachito?

- El 6 de abril fue mi casamiento y él dijo que tenía una sorpresa. Empezó a hablar y yo pensé: “Ndi, papá cuando agarra el micrófono no suelta más” (risas). Me empecé a poner nervioso creí que se iba a pegar uno de esos discursos que sabemos. Él era un tipo muy ñe’engatu, pero no decía disparates sino cosas muy sabias, muy interesantes y la gente siempre le prestaba atención, porque mi papá era una persona muy culta. Empezó a hablar y vi que tenía un paquete de regalo grande a su lado suyo. “¿Qué me va a regalar?, ¿qué me está preparando?”, expresé. Luego vi que tenía rueditas: era una valija. “¿Será que me va a regalar un muñeco nuevo?”, me pregunté.

<p>Junior recibió a Cachito como regalo de parte de su padre Nizugan el día de su boda, en abril pasado. </p>

Junior recibió a Cachito como regalo de parte de su padre Nizugan el día de su boda, en abril pasado.

Foto: Fernando Franceschelli

¿No pensabas que podía ser Chachito?

- No. Luego empezó a recordar la trayectoria de Cachito y yo me preguntaba: “¿Qué se traerá entre manos?”. Hasta que abrió el paquete de regalo y era una valija; abrió esta y sacó a Cachito. Ahí me dijo: “Ahora vas a tomar la posta, a partir de hoy sos el nuevo papá y Larissa (mi esposa) es la nueva mamá de Cachito. Te hago entrega de esto con mucho amor”.

¿Qué sentiste en ese momento?

- Me sorprendió muchísimo; la sorpresa fue muy grande. Papá tenía 62 años de trayectoria y prácticamente ahí se despidió de los escenarios; y que me entregara a Cachito fue algo muy fuerte para mí. Cachito es algo suyo, es como una parte de su cuerpo, él es un hijo más, para nosotros es un hermano más. En ese momento no dimensioné la importancia de recibir esa responsabilidad, por una parte, y sentir ese orgullo, porque Cachito tiene 47 años de vida y 47 años de historia.

<p>El pequeño Juan Bautista Junior junto a su padre Nizugan. </p>

El pequeño Juan Bautista Junior junto a su padre Nizugan.

Foto: Fernando Franceschelli

Un libro sobre la vida de Cachito

Días antes de la partida de su padre, Nizugan Junior conversó con él sobre la posibilidad de escribir un libro sobre el mágico Cachito. “Le dije a papá que quería hacer un libro sobre la vida de Cachito. Una semana antes de que él falleciera fue internado por una retención de líquidos, así que una noche me quedé con él y le dije que quería hacer un libro y también grabarle, porque papá hablaba muy rápido y contaba muchas cosas y anécdotas”, reveló Junior a TVO.

“Me dijo: ‘Yo no sé si vas a poder hacer un libro, mi hijo, porque la gente no va a creer las cosas increíbles que le pasaron a ese muñeco’. ‘Vos no te vayas a preocupar por eso, vamos a hacer’, le contesté. ‘Y bueno, lo vamos a hacer cuando salgamos de esta. Te apoyo’, me respondió. Y esas historias quedaron en la memoria, un montón de anécdotas”, expresó emocionado, al tiempo de revelarnos que ni bien pueda empezará a preparar el material de lectura.

<p>Cachito y Nizugan Junior compartiendo una gaseosa, hace algunos años. </p>

Cachito y Nizugan Junior compartiendo una gaseosa, hace algunos años.

Foto: Fernando Franceschelli

El ansiado hijo varón

Juan Bautista Junior fue un hijo muy buscado por Nizugan, quien fue padre de cuatro hijos: tres mujeres, Susana, Marta y Patricia, y luego llegó el ansiado varoncito.

“Papá siempre contaba que soñaba con tener un hijo varón que siguiera sus pasos, siempre juntaba juguetes para varón en los cumpleaños, compraba cosas para nene; y vinieron tres nenas. Luego llegué yo, cuando ya no tenía esperanzas. El día que nací, el médico le pidió que fuera a comprar unos medicamentos de una farmacia ubicada a unas cuadras; al volver ya había nacido. ‘Ya nació tu hijo, tuviste un varón’, le dijo el doctor, y papá no creyó, se fue y me vio, y mi mamá, sedada, le decía: ‘Tuviste un varón’. Siempre recordaba eso”, manifestó emocionado nuestro entrevistado.

“Desde ahí comenzamos una gran aventura juntos, porque yo era como Cachito también (risas), pero de carne y hueso. Papá me vestía igualito a él, a donde iba tenía la misma ropa que Cachito (risas). Es más, hasta llegué a usar sus prendas. Cuando empecé a actuar con papá, me ponía la ropa del show de Cachito, que a mis cuatro años me quedaba perfectamente”, evocó con una gran sonrisa, como volviendo a su niñez.

<p>Siempre fueron muy compinches Cachito y Nizugan Junior, de niños hasta se prestaban las ropas. </p>

Siempre fueron muy compinches Cachito y Nizugan Junior, de niños hasta se prestaban las ropas.

Foto: Fernando Franceschelli

Una simpática anécdota: el niño que reemplazó a la oveja

Y entre tantas anécdotas de Nizugan Junior junto a su padre y Cachito, el joven mago nos contó una muy simpática y colorida.

“Una vez me hizo aparecer en un show de magia, en el restaurante Yguazú. En ese show realizaba trucos con palomas: las metía dentro de una jaula, cubría con una tela, hacía girar y al destapar aparecía una oveja. Una vez la oveja se enfermó y murió, y él tenía que hacer ese show. Horas antes me dijo: ‘Vení un poco acá, mi hijo’, y calculó: ‘Sí, este va a salir de la jaula’ (risas). ‘¿Y cómo vamos a hacer?, ¿qué ropa le vamos a poner?’, se preguntó y él mismo se respondió: ‘Le pondremos la ropa de Cachito’. Me probó las prendas, me quedaban perfectamente, ¡y esa noche aparecí en la jaula en vez de la oveja (risas)! Desde entonces me llevaba a varios espectáculos y me hacía aparecer”, recordó Junior con Cachito en brazos.

<p>Ya desde chiquito a Nizugan Junior le gustaba jugar con los títeres y hacer trucos de magia. </p>

Ya desde chiquito a Nizugan Junior le gustaba jugar con los títeres y hacer trucos de magia.

Foto: Fernando Franceschelli

Cuatro generaciones unidas por la magia

Nizugan Junior es papá de Juancito (12), quien también empezó a hacer magia a los tres años. “Ahora está practicando nuevamente, lo estoy preparando para que me acompañe en las vacaciones de invierno a los shows”, señaló orgulloso.

Y antes del gran Nizugan, también el padre de este, don Julio Castillo, fue mago. “Mi abuelo fue mago, pero no de los que subían al escenario. Antes se les llamaba mba’e kuaa a los magos que normalmente participaban en las calesitas y en las fiestas patronales, donde hacían sus números de magia. Entonces, cuando se aglomeraba la gente recibían propinas. Mi abuelo Julio Castillo tenía un número de magia fuerte que se llamaba Pasati, volati. Colocaba unas migas de pan, las tapaba con un pañuelo, tomaba las migas de pan abajo de la mesa y, cuando sacaba el pañuelo, subían a la mesa”, rememoró con cariño.

<p>Nizugan Junior está muy orgulloso de su papá, el gran mago Nizugan. </p>

Nizugan Junior está muy orgulloso de su papá, el gran mago Nizugan.

Foto: Fernando Franceschelli

El hermoso recuerdo que dejó Nizugan

A solo días de la partida de su padre, Nizugan Junior expresó sentirse feliz y emocionado por todo lo que le dejó su papá.

“La gente reaccionó bastante por las redes sociales, tengo mensajes que aún no puedo revisar, es la bendición que él me tiró, inclusive ya estando allá arriba: me regaló su público, me gané miles de seguidores en dos días, en el Facebook tenía ocho mil seguidores y ahora tengo más de 20 mil. La gente empezó a levantar fotos de cuando Cachito estuvo en su cumpleaños. Sentí una alegría y un orgullo tremendo, porque en estos tiempos no a cualquier paraguayo se lo recuerda así. Estoy orgulloso de tener un padre como él. Toto era su apodo, una gran persona y también un gran artista”, refirió con la voz entrecortada.

“Yo lo veía preocupado, se venía despidiendo prácticamente; a veces lo veía así, rebuscando entre sus fotos. Él estaba relativamente bien, tenía sus problemitas de salud, pero nunca nos imaginamos que sería algo tan rápido”, concluyó.